La antigua ciudad de Xi’an, en el noroeste de la provincia de Shaanxi, informó el martes de 175 nuevos casos asintomáticos localizados.
Xi’an realizó pruebas en toda la ciudad e impuso un estricto bloqueo a sus 13 millones de residentes la semana pasada, cerrando escuelas, lugares públicos y transporte, excepto para servicios esenciales como supermercados y hospitales. Se impidió a los residentes salir de sus hogares, excepto por razones urgentes, como emergencias médicas.
Este es el bloqueo más grande en China desde Wuhan, que ha llevado al aislamiento de 11 millones de personas.
Con los casos aún en aumento, la ciudad de Xi’an endureció las medidas de cierre el lunes, pidiendo a todos los residentes que se queden en casa a menos que se les permita salir para controles masivos. Anteriormente, a cada familia se le permitía enviar a una determinada persona al extranjero para comprar alimentos cada dos días.
En la plataforma de redes sociales china Weibo, algunos residentes de Xi’an se quejaron el martes de que se quedaron sin comestibles en casa.
Según las nuevas reglas, los estudiantes universitarios deben permanecer dentro de sus dormitorios universitarios, a menos que sean personas con necesidades especiales, mientras que los trabajadores de supermercados, tiendas de conveniencia, centros logísticos y mercados que venden productos agrícolas deben usar mascarillas N95 y guantes médicos, según un comunicado. del Departamento de Estado. Gobierno de Xi’an.
El comunicado dijo que las autoridades ajustarán las medidas de contención en función de los resultados de la última ronda de pruebas masivas.
Las autoridades comenzaron a desinfectar toda la ciudad el domingo por la noche, con trabajadores con equipo de protección y camiones rociando desinfectante en carreteras, ferrocarriles subterráneos, edificios y en el aire. Se advirtió a los residentes que cerraran sus ventanas y no tocaran ninguna superficie exterior ni plantas.
Los medios estatales informaron que 150 médicos militares de la Fuerza Aérea del Ejército Popular de Liberación, algunos con experiencia en la lucha contra el brote inicial de COVID-19 en Wuhan, fueron enviados el lunes por la noche a Xi’an para ayudar con los hospitales locales.
Las autoridades creen que el grupo está vinculado a un vuelo desde Pakistán el 4 de diciembre, donde se encontró que al menos seis pasajeros tenían la versión Delta. Hasta ahora, no se han reportado casos de la variante Omicron en Xi’an.
La ciudad también es un importante centro de transporte en el oeste de China. Su aeropuerto ha estado prácticamente cerrado desde la semana pasada, con todos los vuelos domésticos cancelados.
Según el rastreador de vuelos VariFlight, el martes se cancelaron 681 salidas y llegadas al aeropuerto de Xi’an.